¿Es posible la propuesta de Duque de bajar los impuestos?
Del candidato Iván Duque, del Centro Democrático, se analiza la propuesta que pretende mejorar la remuneración de los empleados.
Por Daniela Palacio y Alejandra Rodríguez – Revista Digital Bitácora
Estudiantes Comunicación Social Universidad Eafit
Iván Duque Márquez, el candidato más joven de los presidenciables, nació en Bogotá el primero de agosto de 1976. Según Congreso Visible, proyecto de la Universidad de los Andes que divulga la actividad legislativa de los congresistas, Duque fue el autor de 58 proyectos de ley y se destacó por su asistencia y autoría de proyectos.
Entre sus debates de autoría legislativa más destacados están estos dos:
- Ley sobre retiro anticipado de cesantías para pre financiar la educación de los hijos (Ley de la República).
- Ley Naranja y economía creativa (en trámite para ser Ley de la República).
Ha escrito para diarios como Portafolio y El Colombiano, El País, de España, y el portal web Kien & Ke sobre temas de actualidad política y democracia.
Ha publicado varios libros como IndignAcción, ideas para la Colombia del futuro; Pecados Monetarios; Maquiavelo en Colombia, Efecto Naranja y es coautor del libro La economía naranja, que escribió junto a Felipe Buitrago Restrepo.
Enfoque en la economía colombiana
La propuesta principal de la campaña de Iván Duque está enfocada en la economía del país, pues promete reducir la tasa de impuestos a la empresa privada para reactivarla desde el comercio.
“Queremos bajar impuestos a la empresa privada y que esta se comprometa a subir el sueldo de los empleados. Queremos eliminar el derroche público, enfrentar la evasión y así liberaremos dinero para bajar impuestos, aumentar la inversión y mejorar el ingreso de los trabajadores”, expresó el candidato.
Entre las propuestas sobre el empleo, Iván Duque propone “articular un sistema donde aumenten las ganancias de las familias. Esos ingresos deben tener estímulos para que la clase media se expanda y pueda ahorrar para un mejor futuro”.
Mónica Durango, contadora pública con especialización en legislación tributaria, ecplica que “los impuestos ahora están en el 40 por ciento (2017). Se paga 34 por ciento de renta y 6 por ciento de sobretasa más otros impuestos. Reducir la tasa de tributación ayuda a que Colombia pueda entrar a hacer parte de los países de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico), el máximo órgano tributario”.
Durango considera positiva la reducción de impuestos para los trabajadores porque en los últimos años el poder adquisitivo de los empleados cada vez es menor.
Al bajar los impuestos, el candidato planea que las personas tengan una mejor remuneración.
La experta explica que la gente podrá invertir más dinero en vivienda y propiedades en lugar de seguir endeudándose, como lo ha venido haciendo en los dos años anteriores, desde que la última reforma tributaria empezó a regir.
Además, considera que la propuesta beneficia a la empresa privada, pues todo lo que la compañía pague a sus empleados lo podrá reducir en impuesto de renta.
Esto también aportaría a la calidad de vida de los empleados y a la generación de nuevos empleos formales.
La propuesta “sí es viable”
Mónica Durango cree que bajar el porcentaje de impuestos es una propuesta viable, siempre y cuando el país recupere esto con crecimiento de la economía.
“Duque dice: ‘si yo bajo la tasa de tributación a las empresas, ellas pueden generar más empleo, mejorar el poder adquisitivo de las personas y eso hace que la economía se mueva.’ Cuando ganas más, consumes más y generas más gastos. Así puede aumentar la economía”, opina la experta.
Durango también explica que la tasa que propone Duque no baja demasiado: serían nueve o diez puntos porcentuales (de 37 por ciento a 27 o 28 por ciento).
Según ella, se estarían recuperando con el crecimiento de la economía, pues habrá mayor recaudo del IVA (Impuesto de Valor Agregado) y otros movimientos comerciales que beneficiarán la economía del Estado.
Si Iván Duque es elegido presidente podría tardar un año en implementar esta medida económica. “El proceso empieza mandando una reforma tributaria al Congreso. Es decir, no creo que se posesione en agosto y esté pasando reforma tributaria en octubre.”
Asimismo, la contadora asegura que estas deben pasarse en el segundo semestre del año para que empiecen a regir desde el siguiente en enero, puesto que la norma tributaria dice que los impuestos se rigen por periodos y se debe esperar a que termine el año anterior.
Si llega a la Presidencia, Duque necesitaría tiempo y una mayoría en el Congreso para la aprobación de una reforma.