Aumenta la popularidad de los mercados campesinos en Medellín
Los precios bajos, la ausencia de pesticidas en los productos y la nueva tendencia al consumo de alimentos orgánicos ha popularizado el número de mercados campesinos en la ciudad. La Alpujarra, el parque La Presidenta y Ciudad del Río, entre los más visitados.
Gracias a fundaciones como Salva Terra, cada vez son más los agricultores que cultivan sus productos de una manera sostenible con el medio ambiente. / Foto Ana María Alvarado.
Por Ana María Alvarado Betancur, Karina Tobón García, Vanessa Hinestroza Chacón y Geraldín Quintero
La actividad agrobiológica en las zonas rurales de Medellín se ha expandido a partir de la conformación de la Subsecretaría de Desarrollo Rural en 2013. Claudia Márquez, primera dama de la ciudad, desarrolló esta iniciativa que busca orientar las buenas prácticas agrícolas para extender la participación de los mercados campesinos en zonas urbanas.
Las reformas del actual alcalde Aníbal Gaviria dieron inicio a un proceso de salvamento y promoción de las prácticas agrobiológicas, que hasta el 2012 solo eran supervisadas y apoyadas por la Umata (Unidad Municipal de Asistencia Técnica).
Desde sus inicios, en 1988, la Alcaldía de Medellín ha apoyado este proyecto con el fin de incrementar la presencia de la labor agropecuaria en las zonas más concurridas de la región y garantizar un crecimiento en la economía campesina de los corregimientos.
Según un informe de la Secretaría de Desarrollo Económico, los puntos con mayor asistencia de mercados agropecuarios son la plazoleta La Alpujarra, el parque La Presidenta y Ciudad del Río, en ellos participan alrededor de 130 comerciantes. Los 13 parques restantes, donde también se lleva a cabo dicha actividad, alcanzan casi 100 participantes. Esta cifra indica un crecimiento de los mercados y demuestra la preferencia en el consumo de los productos orgánicos.
Uno de los factores más influyentes en el aumento de sus ventas es el bajo precio que ellos ofrecen, pues no tienen intermediarios que muchas veces encarecen el producto sin proporcionarle un valor agregado. Otro incentivo para preferir estos productos es que son cultivados sin ningún tipo de aditivo químico o sustancia sintética, con el fin de preservar la calidad del alimento, su esencia natural y la salud de los ecosistemas agrícolas.
“Nosotros aquí ya tenemos una clientela fidelizada. Día a día el consumo de mercados campesinos va creciendo y la gente tiene más arraigo de lo nuestro, pues los productos que se ofrecen son de cosecha directa y se venden a un precio justo”, aseguró Gustavo Arango, miembro de la Subsecretaría de Desarrollo Rural.
Para Raúl de Jesús Bedoya Muñoz, quien comercializa sus productos en el parque La Presidenta, el cultivo orgánico influye en la calidad de los alimentos y por esto prefiere no usar los químicos en su siembra: “Yo llevo cultivando toda la vida y a muchos de nuestros productos no se les echa abono. Aquí cambiamos el químico por lo orgánico y el insecticida por sedimentos biológicos. Los de la Alcaldía y los de la Umata son los que nos orientan en esta nueva forma de producción”, afirmó el agricultor.
Si bien la Alcaldía de Medellín se encarga de hacer la propaganda para la venta de productos orgánicos por las veredas de los corregimientos, hay quienes por su propia cuenta decidieron cambiarse al nuevo formato de producción agrícola. Ana Celi Grajales, residente de la vereda El Plano, en Santa Elena, cultiva sus vegetales de la forma tradicional campesina, es consciente que los alimentos tratados con síntesis químicas afectan a quienes los consumen y deterioran la tierra.
El programa Mercados Campesinos logra la inclusión de la comunidad rural, prolonga la sostenibilidad del medio ambiente y controla los procesos de expansión urbana.
El domingo 23 de agosto de 2015 Mercados Campesinos cumplirá su tercer aniversario de participación en el parque La Presidenta. / Foto Ana María Alvarado.
